El diseño actual de la bandera turca se deriva directamente de la bandera otomana tardía, que se adoptó a fines del siglo XVIII y adquirió su forma final en 1844. Las medidas, las proporciones geométricas y el tono exacto del rojo de la bandera de Turquía fueron legalmente estandarizado con la Ley de la bandera turca el 29 de mayo de 1936.

Varios mitos están asociados con el simbolismo del color rojo y la estrella y la media luna, pero ninguno realmente explica sus orígenes. Aunque la estrella y la media luna a menudo se ven como símbolos musulmanes típicos, de hecho tienen una historia anterior a la aparición del Islam. Las civilizaciones antiguas en todo el Medio Oriente usaban una luna creciente como símbolo religioso, y la antigua ciudad de Bizancio estaba dedicada a la diosa de la luna, Diana. Una estrella, emblemática de la Virgen María, se agregó al símbolo creciente de Diana cuando el emperador Constantino I hizo del cristianismo la fe oficial del Imperio Romano y bautizó la ciudad de Constantinopla en su propio honor.

La media luna y la estrella se asociaron con el Islam cuando los pueblos musulmanes turcos de Asia Central capturaron la península de Anatolia (y, eventualmente, Constantinopla) y agregaron la media luna y la estrella de este último a sus propias banderas rojas. Hubo varias banderas turcas a lo largo de los siglos del Imperio Otomano, la mayoría de ellas incorporando la media luna y la estrella y los colores rojo o verde. En junio de 1793, la bandera que ahora se usaba como bandera nacional turca se estableció para la armada, aunque su estrella tenía ocho puntos en lugar de los cinco actuales. La reducción en el número de puntos estelares se hizo alrededor de 1844. El diseño de esa bandera se volvió a confirmar como la bandera nacional turca el 5 de junio de 1936, después de la revolución liderada por Atatürk, quien había establecido una república en 1923 después del colapso de la dinastía otomana.